¡Oh, a veces… !

El vertiginoso ritmo en el que nos vemos envueltos hoy en día hace que se pierdan cosas realmente importantes por el camino.

Llegamos a dejar de apreciar la calidad de lo bien hecho decantándonos por lo rápido, lo desenfrenado. Buscamos la gratificación instantánea olvidando las cosas artesanas, el colorido y aroma de lo que está hecho con cariño.

A veces es bueno respirar hondo, mirar alrededor y observar esos pequeños enormes detalles que son los que, en definitiva, nos hacen felices. Porque… ¿de verdad es tan importante estresarse por tener un coche más rápido habiendo tantos radares acechando? ¿es mejor ponerse cianótico de un berrinche que permitir que la sonrisa sincera de un bebé nos remueva algo por dentro? Un paseo por el campo, jugar en la nieve, deleitarnos en una playa, disfrutar con las amistades verdaderas viviendo la ciudad de otra manera.

En El Caballo Goloso creemos en lo bien hecho, en tomarnos nuestro tiempo para ofrecer siempre lo mejor y en haceros llegar un poquito de esa felicidad que todos nos merecemos.